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Residuos peligrosos
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¿Qué significa el término "acidificación"?
La basura no desaparece. Podemos recogerla - ¡Bien, León! - y hacernos cargo de ella, pero desaparecer, no desaparece. Ni la basura más grande, como los embalajes, la ropa vieja o los aparatos rotos, ni la basura más pequeña, las partículas diminutas. Cuando soltamos gases de desecho, humo o sustancias químicas, las partículas permanecen en la naturaleza. Y pueden resultar dañinas para el ser humano, las plantas y los animales, aunque dichas partículas no se puedan ver.
En la agricultura a menudo se usan varios tipos de pesticidas para mantener alejadas las pestes de las cosechas. Pero se ha demostrado que algunos pesticidas dañan a otros animales. Por ejemplo, a las abejas. Muchas abejas han muerto. Y las abejas diseminan el polen entre las plantas, para que éstas puedan reproducirse.
Sin abejas, se reduce la polinización de las flores, y las cosechas de manzanas, ciruelas y otras frutas se reducirán notablemente. Así que, un pesticida usado para mejorar la producción alimenticia, la empeora, en realidad, ya que mueren muchos insectos útiles. Usar carbón, petróleo y diésel como combustible, produce dióxido sulfúrico y óxidos de nitrógeno. Cuando los soltamos a la atmósfera, pueden transformarse en ácidos. Y cuando cae el agua de lluvia, también trae consigo esos ácidos.
Se acumulan en la tierra, en los lagos y en las vías fluviales. El entorno se acidifica. Existen especies, como algunos árboles, que no son capaces de vivir en un entorno ácido. Se mueren. A los peces les resulta más difícil reproducirse.
Pero hay especies que salen mejor paradas cuando la naturaleza es más ácida. Estas especies toman el control. La acidificación lleva, por tanto, a una gama más reducida de especies en la naturaleza, y altera el equilibrio ecológico. Hay otras sustancias que son activamente venenosas. Por ejemplo, los PCBs.
Antiguamente se usaban en la industria para reblandecer plásticos. Pero se ha demostrado que los PCBs son venenosos y se descomponen muy lentamente. Una vez han sido liberados en la naturaleza, permanecen allí. Se agrupan en las plantas, en los animales y en los humanos. Los PCBs son peligrosos en muchos sentidos.
Aumentan el riesgo de cáncer y de anomalías congénitas en los niños. Hemos detenido la emisión de PCBs, pero aun así, se pueden encontrar en casi todos los sitios: en el agua y en la tierra. Tardan mucho tiempo en desaparecer por completo del medio ambiente. Hay muchas otras sustancias venenosas que también se van acumulando en la naturaleza sin descomponerse. Algunas siguen emitiéndose desde fábricas y minas en todo el mundo.
Provocan enfermedades en las personas y daños en la naturaleza. Es decir, los humanos usamos pesticidas que acaban tanto con las pestes como con los insectos útiles. Quemamos carbón y aceite, lo que lleva a la acidificación de la naturaleza. Y seguimos emitiendo venenos que se acumulan y permanecen en el medio ambiente durante mucho tiempo. Ya es hora de detener esto, y de empezar a limpiar lo mejor que podamos lo que ya se ha soltado.
Y ésta es una labor que llevará mucho tiempo.