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El Mar del Norte
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¿Qué profundidad tiene el Mar del Norte de media?
Esta es la parte nororiental del océano Atlántico: el Mar del Norte. Está bordeado por las Islas Británicas desde el suroeste hasta el noroeste, por Noruega al noreste, Dinamarca al Este, Alemania y los Países Bajos al sureste y Bélgica y Francia al sur. En gran parte, el Mar del Norte se formó por lentas masas de hielo: los glaciares. En el norte, la costa está marcada por escarpados acantilados y fiordos profundos, mientras que en el sur, hay playas de arena y humedales costeros. Su ubicación en la plataforma continental hace que el Mar del Norte sea poco profundo — una media de tan solo unos 90 metros de profundidad.
La parte más profunda, la zanja noruega, corre paralela a la costa noruega. Abarca entre 20 y 30 kilómetros de ancho y tiene 725 metros de profundidad. El Mar del Norte recibe agua dulce procedente de varios ríos de la Europa continental y de las islas circundantes. El Elba y el Rin son algunos de los ríos más grandes. El agua del Mar del Norte se mezcla constantemente a causa de las corrientes y mareas que aportan un rico suministro de nutrientes.
Estos nutrientes son importantes para la supervivencia de unos diminutos microorganismos llamados plancton, que forman la base de la mayoría de las cadenas alimentarias en el mar. Gracias a la abundancia de plancton aquí viven muchos tipos de peces, incluyendo el bacalao, el abadejo, la caballa y el arenque. En el Mar del Norte también hay diferentes especies de focas, delfines y ballenas. Las costas que bordean el Mar del Norte también forman parte de su ecosistema y son el hogar de muchas especies diferentes de aves marinas, entre ellas la gaviota argéntea y el frailecillo atlántico. Algunas aves se quedan todo el año, mientras que otras simplemente pasan por la región en sus migraciones.
En el Mar del Norte hay una serie de zonas en las que crecen las algas pardas, o quelpos. Estos bosques de algas proporcionan alimento y sirven de criadero y refugio para muchos otros organismos, como los peces, los mamíferos marinos e incluso las aves marinas. Los bosques de algas cuentan con mucha biodiversidad. La diversidad de organismos en el Mar del Norte es elevada, pero varía según la región. Las aguas abiertas en general son más diversas que las zonas de las desembocaduras de los ríos, los estuarios.
Los estuarios son hábitats especiales donde el nivel de sal - la salinidad - es baja, por lo que muchas especies marinas no pueden vivir en ellos. El ser humano y su actividad también tienen un impacto negativo en la diversidad de las especies. Y el Mar del Norte está muy afectado por el impacto de la gente. Por su ubicación, su largo litoral y la gran cantidad de ríos que desembocan en él, el Mar del Norte ha sido durante mucho tiempo una ruta vital para los viajes y el comercio. Además, hay valiosos recursos naturales —gas y petróleo— bajo el fondo marino.
Por eso el Mar del Norte es tan importante para la economía. Durante mucho tiempo, el Mar del Norte también fue una de las zonas más productivas de pesca de todo el mundo. Pero el gran potencial del Mar del Norte para hacer dinero tiene su precio. La pesca excesiva hace que la cantidad de peces disminuya rápidamente. Con el transporte marítimo se introducen nuevas especies invasoras y altos niveles de contaminación.
También hay contaminación procedente de la tierra, incluyendo las aguas residuales y los desechos de las fábricas y las granjas. A lo largo del siglo pasado han desaparecido total o parcialmente muchas especies de plantas y animales por culpa de la contaminación. Ahora luchan por volver. Sin embargo, se están haciendo esfuerzos para restaurar el equilibrio de los ecosistemas y reducir el impacto negativo en la zona. El Mar del Norte todavía puede recuperarse si se le da una oportunidad.
Cosa que nos beneficiaría tanto a nosotros como a la naturaleza.