Métodos de separación
La separación de mezclas
Más formas de separar mezclas
La destilación fraccionada
Más formas de separar mezclas
¿Verdadero o falso? La cromatografía solo se puede utilizar para separar diferentes colores.
Michael necesita algunos clips. Están en algún lugar de este cajón. ¡Oh! ¿Cuándo fue la última vez que lo ordenaste, Michael? ¡Recortes de papel, virutas de lápiz, canicas…! ¡Coger los clips a mano será difícil! ¡Debe haber una manera más fácil! El cajón contiene una mezcla de cosas diferentes. Están mezcladas pero no se combinan en un sentido químico. Por lo tanto, todas conservan sus propiedades originales.
Los clips de metal tienen una propiedad única entre las cosas de este cajón. ¡Son atraídos por los imanes! Sujeta un imán fuerte y muévelo sobre el cajón desordenado. ¡Recogerá todos los clips de metal! Existen otros métodos para separar mezclas que además aprovechan las diferentes propiedades de los componentes de la mezcla. ¡Probemos uno de ellos! Necesitarás un rotulador, un vaso de agua, y una tira de papel de cocina. Coge la tira de papel de cocina y dibuja una línea con un rotulador a un par de centímetros del lado más corto.
Luego, sumerge ese borde de la tira en el agua, pero no dejes que el agua toque la tinta. Mantenlo ahí un momento. La tinta del rotulador es una mezcla de diferentes pigmentos disueltos en agua. Cuando la tira se sumerge en agua, el agua es absorbida a través de las fibras del papel. A medida que el agua sube por la tira, los pigmentos se disuelven más y se extienden por la tira.
Algunos pigmentos se disuelven mejor que otros, y son transportados por el agua más rápido que los que no se disuelven muy bien. Los pigmentos que están hechos de pequeñas partículas también se mueven más rápido que los pigmentos hechos de partículas más grandes. Por eso los pigmentos suben por la tira de papel a diferentes velocidades. Esto da como resultado un patrón de tiras de diferentes colores. Este método de separación de mezclas se llama cromatografía.
También existen otras técnicas de cromatografía que se pueden utilizar tanto en gases como en líquidos. Estas técnicas pueden ayudar a eliminar sustancias no deseadas de las mezclas, por ejemplo, en la producción de combustibles como el biodiesel. O, como en nuestro experimento, la cromatografía también puede ayudar a analizar e identificar sustancias en una mezcla. Esto se usa comúnmente cuando se analizan muestras de sangre o de orina para detectar drogas, por ejemplo. Hay otro método de separación de mezclas a menudo utilizado en laboratorios médicos para separar los componentes de la sangre.
Utiliza un dispositivo que hace girar la sangre rápidamente — una centrífuga. Una centrífuga consta de un soporte - un rotor — en el que se colocan los tubos con la muestra de sangre. Cuando se enciende la centrífuga, el rotor comienza a girar muy rápido, y la fuerza centrífuga comienza a actuar sobre la sangre dentro del tubo. Esto fuerza a las partes más densas de la sangre, los glóbulos rojos, a bajar hasta el fondo del tubo. Los glóbulos blancos menos densos y las plaquetas son forzadas al medio.
Y la sangre menos densa, el plasma, se desplaza a la parte superior. Este método se llama centrifugación. Funciona muy bien no solo con la sangre, sino también para separar cualquier mezcla líquida que contenga diminutas partículas insolubles de sustancias que tengan diferentes densidades. Aparte de los laboratorios médicos, la centrifugación se utiliza para separar la nata de la leche, e incluso en las lavadoras, ¡para separar el agua de tu ropa al final del ciclo de lavado! Magnetismo, cromatografía, y centrifugación son algunos de los muchos métodos que nos ayudan a separar mezclas en muchas áreas diferentes de la vida cotidiana.
Pero cuando se trata del cajón de Michael... ¡una limpieza a la antigua sería de gran ayuda!