
Bucles positivos de retroalimentación

Actualiza para más contenido
¿Verdadero o falso? Hay grandes cantidades de dióxido de carbono congelado en el suelo del norte de Rusia y Canadá.
Imagínate una habitación fría con un radiador eléctrico. El radiador tiene un termostato que controla su temperatura. Cuanto más se enfría la habitación, más se calienta el radiador. Y a medida que la habitación se calienta el termostato baja la temperatura del radiador. Ahora imagínate que el termostato está invertido.
Cuanto más se calienta la habitación, ¡más calor sale del termostato "invertido"! Esto hace que el radiador caliente la habitación aun más... lo que a su vez hace aumentar aún más al termostato... ... y así sucesivamente. A la cadena de estos sucesos de refuerzo recíproco se la llama bucle de retroalimentación positiva.
En la atmósfera terrestre hay varios mecanismos que funcionan de manera parecida a los termostatos. Por ejemplo, cuanto más se calienta la superficie terrestre, más calor se irradia al espacio. Al igual que el termostato en el radiador, esto mantiene la temperatura terrestre equilibrada. Desgraciadamente, hay otros mecanismos que funcionan al revés, como un termostato invertido. Uno de esos mecanismos tiene que ver con la nieve.
La nieve es blanca, así que refleja la luz solar de vuelta al espacio. Cuanta más nieve hay en la Tierra, más radiación solar se refleja. Si la Tierra se calienta, cada vez más nieve y hielo se derretirán. Como quedarán expuestas zonas del suelo y del agua más oscuras, se reflejará menos luz solar. Lo que significa que cuanto más se caliente la Tierra, más radiación solar absorberá, en vez de mandarla de vuelta.
Se convierte en un bucle de retroalimentación positiva, igual que el radiador con el termostato invertido. Si te tomas un refresco frío observarás otro mecanismo. El "agua carbonatada" es agua con dióxido de carbono disuelto. Cuando el refresco está frío, puede retener mucho dióxido de carbono. Pero a medida que el refresco se va calentando, por ejemplo en tu estómago, la solubilidad disminuye.
Entonces el dióxido de carbono sale en forma de burbujas de gas. Vaya. También hay dióxido de carbono disuelto en el mar. Al igual que el refresco en tu estómago, un mar más caliente suelta más dióxido de carbono. El dióxido de carbono que sale del mar contribuye al calentamiento de la Tierra haciendo que el agua suelte aún más dióxido de carbono y así sucesivamente.
Hay un tercer mecanismo que tiene que ver con este gas: el metano. Es un gas de efecto invernadero que tiene aproximadamente 20 veces más efecto que la misma cantidad de dióxido de carbono. Hay lugares en la Tierra, como el norte de Rusia y Canadá, que tienen grandes cantidades de metano congelado en el suelo. Hace tanto frío que el suelo está congelado durante todo el año, y el metano se ha quedado atrapado ahí durante decenas de miles de años. Si la temperatura aumenta tanto que el suelo se derrita, se soltará parte de ese metano a la atmósfera.
Cuanto más metano quede libre, más subirá la temperatura. Y cuanto más suba, más metano se liberará. Otro ejemplo no tan evidente es el vapor del agua. A medida que la atmósfera se calienta, es capaz de retener más agua. El vapor del agua es un gas de efecto invernadero, así que se podría pensar que más cantidad debería llevar a temperaturas más altas: otro bucle de retroalimentación positiva más.
Por otro lado, más vapor de agua en el aire implica que se formarán más nubes, y las nubes reflejan la luz solar, igual que la nieve. Es decir, más vapor de agua en la atmósfera podría tener un efecto de enfriamiento. No se sabe a ciencia cierta qué efecto es más fuerte, o si quizás se anulen mutuamente. Estos bucles de retroalimentación positiva (la nieve derretida que hace que el suelo se oscurezca y refleje menos... el dióxido de carbono liberado de los océanos más calientes, y el metano que sale del suelo congelado) funcionan como termostatos invertidos.
Cuanto más calor hace, más fuertes se hacen estos mecanismos de calentamiento. Y aunque el efecto de cada uno pueda ser pequeño... ... todos juntos podrían desembocar potencialmente en un "vuelco" climático. En el peor de los casos, este tipo de calentamiento global galopante podría durar cientos de años. La mayoría de científicos creen que esta hipótesis no es muy probable, ya que la radiación que ha aumentado en el espacio, el termostato en marcha, acabará por detener el calentamiento.
Pero para entonces, grandes zonas del planeta puede que ya sean inhabitables.