Sistemas de transporte: el ferrocarril

Estamos en 1700 y la Revolución Industrial ha comenzado en Europa. Durante unos 200 años, las vías férreas se han utilizado para mover vagones de carbón y otros minerales a través de túneles con la ayuda de caballos. Pero con la invención de la máquina de vapor, ahora las locomotoras de vapor pueden arrastrar cargas más pesadas a distancias mucho mayores. Y no solo vagones de carbón, ¡sino también vagones de pasajeros! Este es el comienzo del tren.

Hoy en día, el ferrocarril es uno de los modos más importantes, comunes y rentables de transportar bienes y personas por distancias largas y cortas. La mayoría de los trenes modernos viajan sobre dos rieles. Sus locomotoras ya no funcionan a vapor, sino con electricidad o diésel. Algunos trenes operan bajo tierra en túneles donde forman sistemas de metro. Juntos, los trenes y metros conforman el transporte ferroviario, una parte importante del sistema de transporte terrestre.

Los trenes siguen siendo importantes para transportar cargas pesadas y voluminosas, desde automóviles y partes de aviones a grano y trigo. ¡Hasta las vacas se pueden transportar en tren! Los trenes que transportan mercancías como estas se denominan trenes de mercancías. ¡Un solo tren de mercancía puede tener más de 200 vagones! Esto les permite transportar mucho más que un solo camión. Los trenes también llevan pasajeros. En algunos países, los trenes transportan hasta la mitad de todos los viajeros en las ciudades.

Debido a que los trenes pueden transportar a cientos de pasajeros a la vez, son útiles para reducir el tráfico de automóviles en las ciudades. Algunas de las locomotoras más nuevas totalmente eléctricas se llaman trenes bala debido a su forma y capacidad para viajar a altas velocidades. En algunos lugares, ¡pueden viajar a más de 300 kilómetros por hora! Otro tipo de tren no rueda en absoluto sobre ruedas; ¡ni siquiera toca las vías! Este es un tren de levitación magnética.

El tren de levitación magnética de Shanghái transporta a pasajeros 35 kilómetros en solo siete minutos utilizando la fuerza electromagnética. Ir de un lugar a otro en el sistema de transporte ferroviario requiere algo más que el propio tren. Se necesitan vías, personal, infraestructura como puentes y estaciones, y ordenadores para controlar toda la operación. ¡Algunas de estas partes son muy complejas! Por ejemplo, la locomotora que tira del tren tiene motores, generadores, motores eléctricos, ruedas, luces y silbatos. Tiene su propio sistema dentro del sistema de transporte ferroviario general.

Es un subsistema. El sistema de transporte ferroviario se basa en muchos subsistemas para llevar personas y bienes de un lugar a otro. Por ejemplo, Se necesitan personas con muchas habilidades diferentes para operar los sistemas ferroviarios: conductores, cobradores, ingenieros, seguridad, guardianes y trabajadores de mantenimiento. Constituyen el subsistema de gestión del tránsito. Los trenes han transformado la vida de las personas en todo el mundo.

Pueden transportar fácilmente carga voluminosa y son mas rápidos -- a veces mucho más rápidos -- que viajar por carretera. Otra ventaja de los sistemas ferroviarios es que los trenes son, de media, de tres a cuatro veces más eficientes en combustible que los camiones. Solo se necesita un litro de combustible para que una locomotora pueda transportar una tonelada de mercancías más de 200 kilómetros. Esto significa que los trenes queman menos combustibles fósiles, y como resultado de esto liberan menos gases nocivos al medio ambiente. Cuando se trata de transportar bienes y personas, Los trenes son una opción de transporte más respetuosa con el medio ambiente.

A medida que el mundo busca nuevas formas de abordar la contaminación, y a medida que más y más personas en todo el mundo se mudan a las ciudades, el número de trenes que se utilizan en los sistemas de transporte público está aumentando. Construir sistemas ferroviarios rentables seguros, asequibles y que contaminen menos es una tarea muy importante para muchos países en el futuro.