La guerra de Asia-Pacífico

El 7 de diciembre de 1941, Japón bombardea la base militar estadounidense de Pearl Harbor en Hawai sin previo aviso. Poco después, Japón declara la guerra a Estados Unidos. Unas pocas horas después, bombarderos japoneses atacan Filipinas, Singapur, Hong Kong, Shanghai, Guam y las Islas Wake. Las tropas japonesas invaden Tailandia y la Malasia británica. Ese mismo día, Canadá y Australia declaran la guerra a Japón.

El día siguiente, Estados Unidos, Gran Bretaña, Nueva Zelanda y Holanda también declaran la guerra a Japón. China y Japón han estado en guerra desde 1937, pero es ahora cuando llega una declaración oficial de guerra de China. La segunda Guerra Mundial se extiende ahora por todo el mundo. Una de las razones de los ataques de Japón es que necesitan materias primas, especialmente petróleo, para continuar su guerra contra China. El petróleo es abundante en el sudeste asiático, pero está controlado por el Reino Unido, Holanda y los Estados Unidos.

Y han detenido todas las exportaciones de petróleo a Japón. Japón considera que Gran Bretaña y Holanda, que están en medio de una guerra ardiente en Europa, serán incapaces de defender sus colonias ricas en petróleo. Pero hay un problema, Filipinas. Filipinas está controlada por los Estados Unidos y es estratégicamente importante. Si Japón intenta conquistar los pozos de petróleo, la Marina de los EE.UU.

probablemente los defenderá. Por lo tanto, la flota debe ser eliminada. Por eso los japoneses bombardearon Pearl Harbor, donde se suponía que iban a estar los portaaviones estadounidenses, según el servicio de inteligencia japonés. Sin embargo, los 3 grandes portaaviones de los Estados Unidos no estaban allí, estaban en el mar y les causarán problemas a los japoneses más adelante. Por otro lado, los japoneses tienen razón sobre las colonias británicas y holandesas.

Las colonias británicas de Birmania, Malasia y las colonias holandesas en las islas de las Indias Orientales Holandesas son rápidamente conquistadas. La isla del Pacífico de Guam, controlada por los Estados Unidos, es capturada después de un día de lucha. Tailandia también es invadida y el país pronto cambia al lado japonés y declara la guerra a los Estados Unidos y Gran Bretaña. En Filipinas, las fuerzas invasoras japonesas encuentran una fuerte resistencia, pero pronto logran capturar la capital, Manila. Las colonias británicas de Hong Kong y Singapur se ven obligadas a rendirse.

Churchill describe la rendición, la capitulación de Singapur como "el peor desastre y la mayor capitulación en la historia británica". Después de seis meses de intensos combates, los estadounidenses en Filipinas son derrotados. 60.000 filipinos y 20.000 estadounidenses son capturados. Pocos sobrevivirán. Es una de las mayores derrotas de guerra de Estados Unidos.

El comandante de las fuerzas estadounidenses en el sudeste y este de Asia, el general Douglas Macarthur, recibe la orden de abandonar Filipinas. Se escapa a Australia y hace la célebre promesa: "Pasé y volveré" a Filipinas. En mayo de 1942, poco después de la conquista de Filipinas, los japoneses quieren fortalecer aún más su poder. Planean conquistar la parte oriental de la isla de Nueva Guinea, que está gobernada por Australia. Si controlan Nueva Guinea, va a ser difícil para Estados Unidos obtener suministros y personal de Australia.

Los japoneses apuntan a la ciudad portuaria estratégicamente ubicada de Port Moresby. De camino a Puerto Moresby, en el Mar de Coral, los portaaviones japoneses se encuentran con los portaaviones estadounidenses por primera vez. Pero la batalla será la primera en el mar donde los barcos involucrados no luchan entre sí. En su lugar, todo el combate se lleva a cabo desde aviones de combate. Estados Unidos pierde la mayor cantidad de barcos, pero gana la batalla.

Es la primera vez desde el bombardeo de Pearl Harbor que los aliados han logrado detener una ofensiva japonesa. La Batalla del Mar de Coral se convierte en un importante punto de inflexión en la Guerra de Asia-Pacífico.