Expresiones algebraicas
Las expresiones algebraicas
Trabajar con expresiones algebraicas: introducción
Trabajar con expresiones algebraicas: ejemplos
La multiplicación con paréntesis
Un binomio al cuadrado
El signo menos delante de un paréntesis
Trabajar con expresiones algebraicas: introducción
En el polinomio , ¿cuál es el coeficiente de ?
Cuando tratamos con expresiones algebraicas, con tantos números y letras pululando por ahí, es fácil confundirse. Por eso resulta muy útil mantener las expresiones ordenadas y lo más simples que podamos. Aquí tenemos una expresión algebraica con tres términos. Cuatro X, más dos por X, menos X. Lo primero que conviene hacer al ver algo así es deshacerse del signo de multiplicar entre el dos y la X.
El número que va delante de una variable nos indica la cantidad que tenemos de esa variable. Se le conoce como el coeficiente de la variable. No se necesita ningún signo "por" entre el coeficiente y la variable. En este ejemplo los tres términos tienen la misma variable -- son del mismo tipo. Eso significa que podemos seguir y sumarlos.
Cuatro X más dos X da seis X. ¿Y ahora qué? El tercer término de X no lleva coeficiente -- ¡sólo es una X! Si no hay coeficiente indicado significa que hay una de esas variables. X significa una X. Así que restamos la última X y obtenemos un total de cinco X. ¡Y listo!
Hemos simplificado la expresión a cinco X. He aquí otra expresión algebraica. Esta vez con cuatro términos: Cuatro Y, más cinco, menos dos Y, más dos. Hay que empezar juntando los términos del mismo tipo. Primero reunimos todas las Ys.
Cuatro Y menos dos Y igual a dos Y. Luego sumamos las constantes por separado. Las constantes son los números que no tienen ninguna variable. Cinco más dos igual a siete. Decimos que hemos combinado los términos afines.
Eso quiere decir que hemos juntado todos los términos del mismo tipo: las manzanas con las manzanas y las peras con las peras. La expresión algebraica que nos queda tiene dos tipos de términos: un término Y y una constante. Hagamos otra más. Dos M, más M al cuadrado, menos cinco. En este caso ¿tenemos términos iguales? ¡Pues no!
La M y la M al cuadrado no son el mismo término, y por eso no los podemos sumar. Al igual que no se puede sumar la distancia de dos metros y el área de un metro cuadrado, no podemos sumar M y M al cuadrado. Son unidades distintas, distintos tipos de términos. Así que en esta expresión los términos iguales ya están juntos. Pero hay una cosa que aún podemos hacer.
Nos va a ayudar a la hora de organizar los términos: colocamos el del mayor exponente al principio. Lo reordenamos para que nos quede así. Primero el término de la M al cuadrado. Luego el término de la M. Y luego la constante al final.
Esto no cambia para nada el valor de la expresión, pero si siempre ordenas las expresiones de esta manera, te resultará más fácil leerlas e interpretarlas. A una expresión como ésta, con distintos tipos de términos, se la conoce como polinomio. "Poli" significa "mucho": muchos tipos de términos. Y este polinomio en concreto es de segundo grado porque tiene una variable elevada a la potencia de dos. Se trata de un polinomio de segundo grado. Échale un buen vistazo porque te vas a topar con muchos de estos.