
Los gigantes gaseosos

Actualiza para más contenido
¿Verdadero o falso? Los gigantes gaseosos tienen un límite claro entre la superficie del planeta y su atmósfera.
Este es nuestro sistema solar. Cerca del sol hay cuatro planetas rocosos, uno de ellos es la Tierra. Y aquí, en la parte exterior del sistema solar, hay cuatro planetas que son mucho más grandes que los rocosos — Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. Estos cuatro planetas a menudo son descritos como gigantes gaseosos. Cada gigante gaseoso tiene un núcleo metálico, rocoso o de hielo.
El núcleo está rodeado por una capa muy gruesa de elementos ligeros como el hidrógeno y el helio. No hay un límite claro entre el planeta y su atmósfera gaseosa. Los cuatro planetas tienen numerosas lunas, algunas de las cuales, piensan los científicos, incluso podrían albergar vida. Todos los gigantes gaseosos tienen anillos más o menos visibles orbitando alrededor de ellos, hechos de polvo y trozos de roca o hielo. Júpiter es el planeta más grande de nuestro sistema solar.
Su diámetro es aproximadamente once veces más grande que el diámetro de la Tierra. Tiene más del doble de la masa de todos los demás planetas del sistema solar combinados. El núcleo de Júpiter está formado por elementos pesados e hidrógeno metálico. Está rodeado de hidrógeno líquido e hidrógeno gaseoso. Alrededor del 90% de la atmósfera superior de Júpiter es hidrógeno, y el 10% es helio, con trazas de metano, vapor de agua, amoníaco y otros compuestos.
Estos oligoelementos dan diferentes colores a una de las características más prominentes de Júpiter — sus nubes. Las nubes forman un patrón de rayas horizontales paralelo al ecuador de Júpiter. Los gases en la atmósfera de Júpiter se mueven hacia arriba y hacia abajo, colocando a las nubes en patrones de cinturones más oscuros y zonas más claras. En los límites entre cinturones y zonas se forman grandes tormentas, como remolinos parecidos a los huracanes en la Tierra. Pero a diferencia de la Tierra, estas tormentas en Júpiter puede durar mucho tiempo.
Una de ellas, conocida como la Gran Mancha Roja, ¡se ha observado durante 400 años! Saturno es ligeramente más pequeño que Júpiter. Su diámetro es nueve veces mayor que el de la Tierra. En muchos sentidos, Saturno es muy similar a Júpiter pero tiene menor densidad. ¡En realidad es el planeta menos denso del sistema solar! Las nubes en la atmósfera exterior de Saturno son más gruesas que en Júpiter, lo que hace que los patrones de rayas sean menos visibles.
Saturno es probablemente más conocido por sus hermosos anillos. Están hechos de polvo y trozos de hielo y se extienden a miles de kilómetros de distancia del planeta ¡aunque solo tienen cien metros de grosor! Desde el 2021 se cree que Saturno tiene la mayor cantidad de lunas que cualquiera de los planetas de nuestro sistema solar ¡Se han observado más de ochenta! Urano y Neptuno son mucho más pequeños que los otros dos gigantes gaseosos. A veces se les llama los planetas gemelos porque son muy similares entre sí en tamaño, masa y composición.
En comparación con Júpiter y Saturno, Urano y Neptuno contienen más "hielo". Este hielo es agua, amoníaco y metano en estado sólido. Por ello a veces los científicos clasifican a estos dos planetas como gigantes de hielo en lugar de gigantes gaseosos. Lo que hace que Urano sea único es que su eje de rotación no es perpendicular a su órbita alrededor del sol. En vez de ello, el planeta parece estar inclinado de lado.
Sus bandas de nubes apenas visibles se mueven en la dirección opuesta a las de los otros tres planetas gigantes. Neptuno es un poco más pequeño que Urano pero tiene mas masa y es el planeta gigante más denso de nuestro sistema solar. La atmósfera de Neptuno tiene patrones meteorológicos activos y visibles, como tormentas que aparecen como manchas oscuras que van y vienen. Al estar tan lejos, los planetas que están fuera de nuestro sistema solar son difíciles de estudiar y los científicos aún tienen mucho por descubrir.